Uno de los grandes ausentes durante la última temporada antártica fue el rompehielos Almirante Oscar Viel Toro, de la Armada de Chile, el cual brinda cada verano un insustituible apoyo logístico y operativo a la actividad científica en el continente blanco, además de su aporte a la seguridad humana en el mar.
Sin embargo, el buque debió ser sometido a una serie de mejoras en los Astilleros y Maestranzas de la Armada, en Talcahuano. Tras una espera de más de 15 meses, el navío arribó el domingo a Punta Arenas.
En la etapa final de su trayecto a Punta Arenas, el Viel, dependiente de la IIIª Zona Naval desde 2007, recibió la visita del jefe de la institución, contralmirante Felipe Ojeda Simons. El jefe naval se embarcó el día 13 vía helicóptero (de la Fuerza Aeronaval Nº2) para navegar el tramo del estrecho de Magallanes, desde el paso Tortuoso hasta el muelle Arturo Prat.
Ojeda se reunió a bordo con la dotación y pasó revista a las dependencias de la unidad, junto con verificar en terreno la modernización del sistema de control de la propulsión y el nuevo ecosonda multihaz. Este último permitirá a la unidad efectuar un sondaje en la Plataforma Continental Antártica.
Durante 2006, la Armada ya había invertido 3,5 millones de dólares para repotenciar el navío en toda su capacidad operativa. El Almirante Viel fue construido en 1969 en astilleros de Montreal, Canadá.
La Prensa Austral
No hay comentarios:
Publicar un comentario