Desde Alemania, la estudiante de doctorado del Instituto Alfred Wegener para Investigaciones Polares y Marinas (AWI), María José Díaz, nos relatará las buenas y malas noticias que trae el calentamiento global para los pequeños organismos que habitan en fondos arenosos.
La campaña se desarrollará en Ias zonas costeras de islas Decepción y Livingstone. / D.C
Científicos de la UCA analizan el papel de estas aves en los ciclos bioquímicos de la Antártida
El estudio se desarrollará a lo largo de las próximas dos campañas en el continente
Investigadores de la Universidad de Cádiz, coordinados por el catedrático en el departamento de Ciencias de la Tierra, Luis Barbero, participan en un estudio que tiene como principal objetivo conocer el papel que juegan los pingüinos en elfuncionamiento ecológico de la Antártida.
Este proyecto, conocido como PiMetAn y dirigido por Antonio Tovar del Instituto de Ciencias Marinas de Andalucía del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (ICMAN-CSIC), pretende analizar desde la producción fitoplanctónica hasta laevolución de las poblaciones de pingüinos, pasando por el estudio del krill(artrópodos marinos de los que se alimentan pingüinos, aves y mamíferos marinos, focas y peces en general), que actúa como eslabón clave en la cadena tróficaantártica. De esta forma, este grupo multidisciplinar de investigadores centrarán buena parte de su trabajo en analizar la composición en metales y nutrientes del guano (sustrato resultante de la acumulación masiva de excrementos) en diferentes colonias de pingüinos, prestando especial atención a la forma química en la que se liberan esos componentes con el propósito de evaluar su efecto nutritivo y tóxico.
“Estos metales aun presentando concentraciones muy bajas son constituyentes esenciales para el funcionamiento de los ecosistemas en los océanos, estando además distribuidos de forma heterogénea. Según donde se encuentren, pueden actuar como nutrientes esenciales (por ejemplo, el hierro), o bien como tóxicos (elplomo)”, como explican los investigadores. Así, el reciclado de metales a lo largo de la cadena trófica antártica resulta clave para el proceso de funcionamiento del ecosistema y por tanto, para el mantenimiento de su biodiversidad a escala global, algo que “hemos tenido muy en cuenta a la hora de plantear este proyecto de cara a entender la evolución histórica de estas especies y predecir los efectos que tendría el calentamiento global sobre sus poblaciones y, por tanto, sobre el ecosistema antártico”.
“El papel de los pingüinos en los ciclos bioquímicos de estas regiones es muy importante”. Las especies de pingüino adelia, barbijo y papúa, por ejemplo, cuentan con características esenciales para comprender el reciclado de metales y nutrientes en la cadena trófica antártica, ya que se alimentan casi exclusivamente de krill. Su población alcanza alrededor de los 17 millones de individuos y su ciclo de vida se desarrolla de manera permanente en la Antártida, pasando buena parte de su vida nadando y alimentándose. Además, estudios recientes han identificado al krill comoorganismo principal en este proceso de reciclado. Con una biomasa de más de 300 millones de toneladas, este organismo es, por un lado, un consumidor de productividad primaria (microalgas, protozoos, zooplancton y bacterias) y por lo tanto, acumulador de metales, y, por otro, el sustento de animales antárticos.
El proyecto PiMetAn cuenta con un equipo de científicos formado por doctores en Ciencias del Mar y Ambientales, Química, Biología y Geología pertenecientes a instituciones entre las que se encuentran, además del ICMAN-CSIC y la UCA: la Universidad de Cantabria (UNICAN), el Instituto Español de Oceanografía (IEO), la Universidad Adolfo Ibáñez de Chile, la Universidad de Tasmania (Australia) o la University of British Columbia de Canadá.
Con el fin de alcanzar los objetivos de este estudio, el equipo de científicos llevará a cabo dos campañas a la Antártida que se centrarán en el estudio de la influencia de los pingüinos en las zonas costeras de las islas Decepción y Livingston. De hecho, está previsto que los primeros resultados experimentales se obtengan una vez transcurrida la primera campaña, prevista para el próximo verano antártico, entre diciembre de 2020 y febrero de 2021.
Por una parte, el equipo investigador realizará desde experimentos en loslaboratorios de las instalaciones situadas en las bases antárticas españolas, hastainmersiones acuáticas en la zona costera bajo influencia de colonias de pingüinos, sin olvidar que usarán sensores integrados en drones e imágenes satélitales para el estudio de producción primaria, calidad del agua, plumas térmicas o turbidez en la zona costera. Hasta el momento, los investigadores que trabajan en el proyecto PiMetAn han iniciado la adquisición de equipos y una serie de entrenamientos centrados en la inmersión en aguas polares y el pilotaje de los drones.
Diario de Cadiz EL PROYECTO
LA HIPÓTESIS
Y EL PORQUÉ DE NUESTRA INVESTIGACIÓN
EL reciclado de metales a lo largo de la cadena trófica antártica resulta clave para el funcionamiento del ecosistema Antártico y el mantenimiento de su biodiversidad de manera global. Los pingüinos adelia, barbijo y papua reúnen una serie de características que lo hacen idóneos para el reciclado de metales y nutrientes en la cadena trófica Antártica: se alimentan casi exclusivamente de krill, su población alcanza los 17 millones de individuos, con una amplia distribución su ciclo de vida se desarrolla de manera permanente en la Antártida pasando buena parte de su vida nadando y alimentándose. A pesar de todo ello, el papel que juegan los pingüinos en la producción primaria en particular y en el funcionamiento ecológico antártico en general no ha sido hasta el momento estudiado.
EL EQUIPO DE INVESTIGADORES
NOS APASIONA NUESTRO TRABAJO
Pimetan cuenta con un equipo científicos multidisciplinar compuesto por doctores en Ciencias del Mar y Ambientales, Química, Biología y Geología. El equipo está compuesto por investigadores e investigadoras pertenecientes a diferentes instituciones nacionales y extranjeras, entre las que se incluye el Consejo Superior de Investigaciones Científicas a través del Instituto de Ciencias Marinas de Andalucía (ICMAN-CSIC), la Universidad de Cantabria (UNICAN), la Universidad de Cádiz (UCA), El Instituto Español de Oceanografía (IEO), Universidad Adolfo Ibáñez (Chile), Centro de estudios Avanzados en Zonas Áridas (Chile), University of Tasmania (Australia), Edith Cowan University (Australia) y University of British Columbia (Canadá).
ACTIVIDADES
Son numerosas las actividades que el equipo Pimetan realizará desde el inicio del proyecto hasta la finalización del mismo. El proyecto se inicia con actividades que incluyen reuniones de coordinación, adquisición de equipos, entrenamientos y especializaciones de actividades en zonas polares, etc. Una vez preparados y equipados, se realizarán dos campañas de muestreo en pingüineras de las Islas Decepción y Livingston, donde se encuentran las bases Antárticas españolas Gabriel de Castilla y Juan Carlos I respectivamente. Se obtendrán, asimismo, muestras adicionales de otros sectores gracias a la participación en el proyecto de investigadores Chilenos y Australianos, países estos que tienen bases científicas en otros territorios antárticos. Una vez en la Antártida, el equipo investigador deberá realizar desde experimentos en los laboratorios en las instalaciones de las bases Antárticas españolas hasta inmersiones subacuáticas en la zona costera bajo la influencia de las pingüineras. Además, el equipo investigador usará sensores embarcados en drones e imágenes satélites para el estudio de parámetros físicos, químicos y biológicos en la zona costera.
Un barco navega por el océano, sacudido por las olas. A bordo, unas cuarenta personas enfrentan el temporal. Miembros de Centre Terre van rumbo a los confines de la Patagonia, hacia el “mundo del fin del mundo”, a la isla chilena Madre de Dios.
Este territorio de cuarenta kilómetros de largo por veinticinco de ancho, sacudido por los vientos de los 50 Aulladores y azotado por la lluvia 300 días al año, fue explorado formalmente por primera vez en 2000. En esta isla, glaciares de mármol, cuevas del tamaño de catedrales y un bosque primario digno del paisaje de una película de ciencia ficción esperan a los científicos. Durante dos meses, este equipo multidisciplinario franco-chileno compuesto por espeleólogos, buzos, geólogos, botánicos, arqueólogos permanecerá en la isla en autonomía completa para estudiar su particular historia geológica, inventariar sus especies (algunas endémicas) y reencontrar las huellas de los hombres y mujeres que antaño la habitaron.
¿Cómo no compartir la emoción y la curiosidad de estos experimentados exploradores, autofinanciados, que se lanzan a descubrir uno de los últimos territorios inexplorados del planeta? Desde la cálida atmósfera del campamento base a los momentos más peligrosos de la expedición, el espectador sigue, paso a paso, esta extraordinaria odisea en medio de un impresionante paisaje. Las imágenes de los glaciares de mármol, de las azules cuevas glaciares o del bosque magallánico son simplemente excepcionales. Ministerio de Bienes Nacionales